
Las heladas y la falta de agua dieron lugar al secado del material vegetal y favorecieron la aparición de estos eventos. Desde el Inta en conjunto con otros organismos sugieren prácticas para prevenirlos.
En un marco de ausencia de lluvias y heladas de moderada intensidad que se registran en Tucumán, la vegetación se secó y dio lugar al escenario perfecto para los incendios, ya que favorece la quema de pastizales y superficies ocupadas por cultivos durante el rebrote del cañaveral.
Dada la situación, especialistas del INTA Famaillá de Tucumán trabajan junto con organismos gubernamentales provinciales y el sector agroindustrial cañero para promover la no utilización del fuego. En ese sentido, destacan que la tecnología de cosecha en verde para la caña de azúcar ayuda a prevenir incendios.
Actualmente, más del 90 % de la cosecha de caña de azúcar en Tucumán se realiza con máquinas integrales en verde. Esta tecnología sobresale por su velocidad y también permite dejar el rastrojo en superficie, que aportará materia orgánica al suelo.
“Devolvemos parte de los nutrientes que fueron extraídos durante el período de crecimiento del cañaveral, además, el aporte lógico que implica la no utilización del fuego al ambiente al evitar la emisión de gases de efecto invernadero”, explicó el investigador Arturo Felipe, del INTA Famaillá